Uno asumiría que el objetivo de las autoridades ante la Ley Seca es reducir el consumo de bebidas alcohólicas. Sin embargo, los datos analizados en más de 4 mil tiendas de autoservicio y clubes de precio en todas entidades federativas de la República Mexicana, presentan una realidad distinta. Por lo tanto, el mercado de bebidas alcohólicas es bastante resiliente frente a la Ley Seca, en gran parte debido a un consumidor que busca cómo adaptar sus patrones de consumo.
